miércoles, 10 de octubre de 2007

IN.PRESIONES 5.0

Kosovo duele a la vista.

El paisaje kosovar tiene aire post-apocalíptico, como si estuviera en un decorado de Mad Max pero demasiado realista.

La primera impresión es desalentadora. Fabricas abandonas, herencia de un pasado comunista, edificios de glamouroso cristal que brotan entre casas ruinosas… Campos sin cultivar, plantas mutantes nacidas entre los escombros, animales alimentados por los restos de los restos, amén…

Y la carretera, o lo que queda de ella, rompiendo el horizonte. La carretera inexistente se pelea con el escaso asfalto, los kamikazes se lanzan a adelantar en búsqueda de la vida en el más allá, que por fin les traiga la paz…

El humo lo impregna todo, como una pátina que aumentara la sensación de dejadez…

Y a la vez un panorama plagado de casas en eterna construcción, casas a medio construir, muros y muros de ladrillos, que nos demuestran que el tiempo se ha parado, la vida se paró y desde entonces nada es igual.

En algún rincón de este caos, reina el encanto de Kosovo, o no.

kosovarian Puthje -besos kosovares-

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1 comentarios:

A las 11 de octubre de 2007, 16:45 , Blogger rAnita nOe ha dicho...

Lo peor de todo es cuando la gente decide seguirle la corriente al tiempo y se quedan paradas también... muchas veces resulta más cómodo quedarse parado que luchar por la vida que sigue, porque ésta siempre sigue..
besos

 

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